Camila, la líbero que va por el bronce

Su mirada es fija. Ceño fruncido. Concentración absoluta. A uno de los integrantes del cuerpo técnico le pide que clave cada vez con mayor fortaleza. Que el balón toque el piso es una derrota para ella. Hace hasta lo imposible por sostenerlo en el aire. Ese es el calentamiento ideal para Camila Gómez.

La líbero del equipo de Valle, que este viernes en la tarde en el Coliseo Enrique Triana Castilla de Ibagué va por el bronce en los Juegos Nacionales, desde el mismo entrenamiento se exige al máximo. Sabe que en la preparación está la clave para que en la competencia misma no haya excusas y más bien resultados.

“Lo más difícil de mi posición es la responsabilidad en si porque sólo trabajamos dos fundamentos (recepción y defensa), entonces hay que hacerlos bien, mejor dicho casi perfectos, entonces la presión es alta”, confiesa la jugadora que se hace distinta con el propio uniforme, al usar uno distinto al de sus demás compañeras por reglamentacón de la Federación Internacional de Voleibol, FIVB.
 
Camila también es la de menor estatura. Pero Lo que le falta en centímetros le sobra en voz de mando. “La líbero es como la segunda capitana al ser la líder de la defensa. Organiza más que la misma pasadora porque tiene más tiempo de observar”. “No tengo que preocuparme por bloquear y puedo estar más pendiente de lo que hacen las muchachas y por eso puedo hablarles un poquito más”, agrega la deportista que de sus 20 años de edad, 14 se los ha dedicado al voleibol.

Desde pequeña fue líder, condición que nutre a través del ejemplo. “Con los resultados uno se gana el respeto. Si hago las cosas bien ellas van a confiar en mí y poco a poco me he ganado ese voto”, asegura.

Para Gómez, los Juegos Nacionales representan más que un reto. Marcan la relación con su departamento. “Entré a la liga en 2008 para la categoría infantil y recuerdo que viví esos Juegos como aficionada. Ya en el 2012 los jugué en Popayán y ahora estamos en estos en Ibagué, con la ilusión de ganarlos”, advierte.

Estuvo cerca del oro. Antioquia se atravesó en el sueño.  Esta tarde en el Coliseo Enrique Triana Castilla frente a Bogotá luchará por el tercer lugar de las justas. Respeta al rival, pero no le teme, como tampoco a los pelotazos a los que siempre está expuesta. Todo por una razón que la ha llevado a ser referente de su equipo: “Si entras con miedo ya vas perdiendo”.


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